
$ 45.000
SizeTalla única
ColorNegro, Gris, Azul, Fucsia, Rojo
Envíos a toda Colombia$10mil
Fular Microperforado
De todas las herramientas que existen en el mercado para poder amamantar bebé de la manera más discreta y sobre todo sin perder el glamour están las mantas de lactancia. Aquí hay un pequeño segmento con algúnas capas que te podrían interesar.Estos cobertores vienen en telas muy suaves y con estampados y colores muy delicados y a la moda. La marca kangutingo se ha logrado posicionar gracias a la calidad y frescura de las telas, Tambien te damos la opción de amamantar a tu bebé mientras caminas, un uso practico con los fulares portabebé.
A continuación verás un cobertor especialmente diseñado, con un refuerzo de silicona en la parte del cuello para que el bebé tenga una entrada de aire y las mamitas vean a su bebé y a la vez puedan tener ese vinculo de lactancia como si lo estuviera amamantando en casa.
CÓMO ES AMAMANTAR EN LA ACTUALIDAD?
Eres una mujer más o menos libre que trabaja, tiene una pareja, un piso y que los fines de semana disfruta saliendo por ahí, leyendo, viajando, haciendo actividades lúdicas, y todo en base a lo que más o menos te apetece hacer en cada momento. Un buen día decides que es un buen momento para ser madre, y unos meses después das a luz a tu primer hijo. Y de repente tu vida cambia de un modo que ni en sueños llegaste a imaginar, convirtiéndote en la persona a la que reclama el bebé casi cada hora hasta el punto que llegas a sentirte "una vaca lechera"o una "teta andante". Los sentimientos no son en realidad análogos, pero están relacionados. Como pueden diferenciarse un poco (creo yo), vamos a hablar de ellos por separado y así vemos en qué se diferencian y en qué se asemejan, siendo posible sentir solo uno, los dos, o ninguno.Una vaca lechera es aquella que amamanta a sus crías y que, además, es ordeñada de manera frecuente para proveer de leche a la industria láctea y a los humanos como consumidores finales de la leche y sus derivados. Digamos que una vaca lechera no es lo que se puede decir "un animal libre", porque su existencia y su alimentación pasan a ser muy controladas para que puedan hacer su función con la mayor efectividad y eficiencia.
Pues bien, es normal que una madre pueda llegar a sentirse así, poco libre (¿qué madre lo es?) amamantando cada hora o cada dos horas a un bebé que tiene comportamientos bastante esclavizantes hacia la madre, vamos, que si hay que comparar entre un ganadero y un bebé, yo diría que los primeros pueden llegar a ser más amables y considerados: Un bebé no tiene ninguna espera, llora y si no tiene la "ubre" disponible puede llegar a ponerse muy rojo y a gritar como un poseso. Del enfado puede llegar a hacerse caca encima. No da lugar a ningún tipo de negociación. De hecho, si le das un sustituto de silicona no alimentario, alias chupete, no dudará en escupirlo.
¿En algún momento la lactancia te hizo sentir una vaca lechera?
No estás sola. Y si encima te lo tomas con humor y aceptas ese rol, aún puedes sentirte menos sola, porque yo creo que todas las madres, en uno u otro momento, han llegado a hacer un comentario así: "madre mía, a veces me siento como una vaca lechera, todo el día con la teta fuera y con el bebé venga a pedir más producción. Como sigamos así monto una fábrica de leche materna y empiezo a envasarla".
Entrega a domicilio
Nequi, Daviplata, (Bancolombia/nequi): 3115093291
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