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No al fular casero

Yo no recomiendo hacer un fular, porque un fular casero te servirá para el primer tiempo, pero cuando tienes un fular comercial, te das cuenta de la diferencia,
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¿comprar o hacer un fular?

"Yo no recomiendo "hacer" un fular, porque un fular casero te servirá para el primer tiempo, pero cuando tienes un fular comercial, de marca, te das cuenta de la diferencia, en cuanto a comodidad." Irene
El fular o portabebe es una tela cuyo tejido se caracteriza porque se estira en diagonal, pero no en forma longitudinal o transversal, lo que permite que la prenda no se deforme considerablemente con el uso; por supuesto esta característica la tienen los fulares elásticos. Cuando se coloca al bebé y se ajusta la tela quedará debidamente posicionado, sin presentar rebote ni movimientos de un lado a otro y el nudo garantiza seguridad. El bebé tendrá un leve movimiento producto del balanceo natural por los movimientos de la madre, ello prácticamente le acuna.

La tela queda muy bien amoldada al cuerpo del bebé y de la madre, evitando los pliegues y permitiendo el máximo confort. La tela también se caracteriza por ser suave, traspirable, es en algodón lo que ayuda a que sean frescos. Igualmente se pueden elaborar en lana para climas más fríos, los fulares han sido sometidos a pruebas de resistencia, por ejemplo los fulares Kangutingo, se han probado con niños hasta de cinco años de edad y han mostrado su alta resistencia.

Las telas quedan bien ajustadas, al ajustarlas correctamente no tenderán a replegarse sobres í mismas. Es muy cómoda, no lástima el cuerpo del bebé ni de quien portea, es mullida en los hombros y se desliza correctamente por el cuerpo cuando se requiere hacer el nudo, no es una tela rústica.

Fular Portabebe

El fular es el portabebés más preferido, es muy versátil y duradero, ya que puede usarse con el bebé desde recién nacido hasta el final de porteo. Permite hacer una variedad de nudos lo mismo que para hacer diferentes colocaciones en diferentes posiciones, lo que permite que quien portea pueda tener muchas opciones y no cansarse con una sola, de esta manera se ayuda mucho el porteador cuando quiere distribuir el peso en distintas posiciones de porteo.

Si bien es cierto que se puede comprar cualquier tela, no todas son aptas para el fular, muchas son para prendas de vestir y no para llevar bebés. Si bien cierto que ciertas telas ofrecen una textura suave al tacto y se pueden sentir más o menos cómodas, seguramente no tendrá un tejido que te permita cumplir con las características esenciales del fular. Lo mejor es tener en cuenta que los fulares se elaboran por empresas que se dedican al porteo y que conocen bien ciertos requerimientos a tener en cuenta.

Los fulares tejidos para tu maternidad suelen ser una tira de tela de 0,70 metros de ancho, con un largo que va variando. Los hay desde 2.70 metros de largo hasta los 4,70 metros o incluso 5,20 metros, ello depende de la marca del fular, ya que el largo de cada talle (talle 2, talle 3 y así) puede variar de una marca a otra. Existen fulares de distintos largos, y cada porteador elige el largo dependiendo del uso que se le vaya a dar, así como del niño que se deseé portear, de la situación de porteo y de la experiencia del porteador.

Los fulares tejidos que más prefieren son los fulares largos (de 4,20 metros a 4,70 metros, siempre dependiendo de la marca), ya que con ellos se pueden hacer nudos de varias capas (varias capas de tela sobre el cuerpito del bebé), y son los nudos de varias capas los que más peso del bebé soportan (los nudos igual se usan como ayuda de acuerdo al ir ganando peso el bebé), y por los que suelen empezar las madres y padres canguro. Si eres primeriza o primerizo en el porteo es seguro que necesites mucha cantidad de tela, para ajustar la tela para hacer correctamente un nudo, ya que es algo que te llevará algún tiempo de aprendizaje, pero una vez logrado ya verás lo sencillo y cómodo qué es. Los nudos con los cuales se suele iniciar; a saber: la cruz envuelta, la mochila cruzada, la doble hamaca, necesitan una buena cantidad de tela. Además, suele darse que los padres se sienten más seguros si su bebé está sostenido por más de una capa de tela.

Los fulares cortos o "shorties" son los elegidos por las madres que ya tienen una experiencia. Como saben ajustarlo correctamente no van a necesitar tela de más. Hacen los nudos de forma correcta y no sienten que requieren mayor cantidad de tela, están confiadas y seguras. De todos modos, hasta con fulares cortos se puede ajustar con varias capas, ello ajustando muy bien la tela.

Muchas veces, por ser el fular una tela tan resistente y especialmente creada para cargar bebés y niños o también usado para la lactancia, se confeccionan las bandoleras y mei tais con tela de fular. En el mundo del porteo se conoce como "transformación". A un portabebés determinado, como puede ser la bandolera o el mei tai, se le añade el confort extra del fular. Esto hace que las bandoleras y mei tais tengan un soporte y comodidad añadido. Para el caso de las bandoleras, donde por lo general el peso del bebé se lleva en un solo hombro, tener una bandolera de fular hace que el porteo asimétrico sea un poco más amigable, más que nada si el bebé ya es grande. Y el mei tai, que se usa con niños más grandes, si es de tela de fular, tiene un soporte inmejorable.

Los fulares, son una excelente herramienta de apego maternal. Te permiten vivir una maternidad con un vínculo amoroso junto al bebé. Además es de tener en cuenta, que ellos necesitan mucho de sentirse protegidos y seguros.


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por qué no hacer un fular casero
(っ◔◡◔)っ ♥ Un vínculo piel a piel ♥ ℚueremos que vivas la experiencia del porteo de una forma segura